Con un comienzo en el que el protagonista se encuentra caminando y al instante esta recluido en una especie de casa en la que no hay ni un solo brillo de luz, completamente en la oscuridad. Gran comienzo, y muy adicto a medida que van pasando las páginas (a penas tiene 100), por lo que es mucho más fácil su lectura y en una o dos tardes puedes saber cual es el final.
A medida que pasan los días el protagonista, Jorge Ozadia, va reconociendo cada habitación de la casa mediante las manos o el olor, como compañía tiene un gato el cual tampoco ve absolutamente, a pesar de la leyenda de que los gatos pueden ver en la absoluta oscuridad.
Va consiguiendo comida con mucho apuro, apenas consigue dormir y está empezando a desesperarse, ya que no sabe absolutamente nada de como ha llegado ahí, y lo que es más importante, el porque.
Esta mini-novela es del escritor José Luis Velasco, poco conocido pero con una gran habilidad para literatura y la filosofía, de hecho estudio ambas carreras y se dedica por entero tanto a la literatura como a la ilustración, muchos de sus libros están ilustrados por él mismo, este no es una excepción, aunque son bastante discreto, todo hay que decirlo. Nominado a diversos premios como el "Alfaguara" o el "Gran Angular", consiguió algo más de fama al conseguir el premio "Woody" para narraciones de fantasía. Colabora a menudo con Carmen Morales, bajo el seudónimo "Samuel Bolín".
Este valenciano criado en La Mancha,

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